Me gusta la expresión “He hablado con…..”, aunque parezca un verbo de “yo actúo”, encierra un proceso de ida y vuelta que es lo que te envuelve; esa envoltura es la diferencia entre yo digo y yo hablo.
Hablar implica siempre que haya otro, que te dirijas a personas que escuchen y conlleva ese ambiente de feed-back, de miradas, gestos, palabras, sentimientos,… que conectan con lo que tú dices.
Hablar le quita fuerza a las palabras para dárselas al sentir. ¡Qué a gusto te quedas cuando hablas con alguien!,……¿de qué?….de lo que nos apasiona.
Hay personas con las que es un gusto hablar y otras con las que es muy difícil, sencillamente porque éstas últimas no están en actitud de hablar; ¿entonces?, cambia el momento, cambia el escenario, cambia el mensaje o sencillamente cambia de persona; no tendrás éxito si esa persona decide no querer hablar contigo.
Un ratito de Hablar con alguien es una vivencia placentera, porque siempre te aporta. ¿Hablamos? 