Comenzar conlleva miedo, inseguridad, expectativas, ilusión; conlleva presente y futuro, conlleva acción y foco.
Comenzar te vuelve a poner en movimiento, arranca con una oportunidad de conseguir algo, de hacer que algo pase.
Comenzar requiere de tu decisión, de que te sitúes en una casilla de salida y hagas que de nuevo se inicie una partida.
Hay partidas que comienzan con el único objetivo de pasar de fase, otras de llegar al objetivo y otras en las cuales sólo quieres disfrutar de la jugada.
En cualquier caso comenzar significa que puedes de nuevo conseguir lo que te propongas, que aprendiendo de partidas anteriores puedes avanzar de manera diferente y por lo tanto nada será igual.
Comenzar es dar oportunidad a lo nuevo, a la sorpresa, a la incertidumbre, a la posibilidad de opciones.
Comenzar es no pararse, no conformarse, no acomodarse, es seguir, es soñar, es VIVIR.