Sonreír es el mayor de todos los “super-poderes” que puedes poseer.
Tu mundo y el de los demás cambia cuando tú sonríes,..¿no lo crees?, ¡pruébalo!
Las mismas palabras con una sonrisa cambian de significado, la misma emoción se siente distinta, la misma mirada transmite diferente.
Acércate a personas con facilidad de sonrisa porque es contagioso, practica provocando momentos que te generen sonrisas, así te generarás el hábito de sonreír.
Mírate al espejo y ensaya tu sonrisa, porque cuando en cualquier momento sonrías te acordarás de lo bonita que se te pone tu cara al hacerlo y querrás mantenerla todo el tiempo.
Sonreírle a la vida no tiene el poder de cambiar lo que sucede, pero sí te aporta esa ACTITUD que te permite ver los matices, encontrar las soluciones, sentir las ganas de seguir, confiar en ti, en los demás.
Regalar una sonrisa es regalar esta actitud, ¿te imaginas mejor regalo?