Me gusta esta palabra porque es única. No hay otra palabra, para mí, que exprese ese estado de ánimo, ese sentimiento que de pronto siento y que sólo puedo describir como “estoy enfadada”.
El enfado no es “contra” alguien o “contra” algo; es cierto que es alguien o algo lo que te lo suele provocar, pero no te enfadas con nadie, es algo contigo misma.
Es una mezcla de impotencia, tristeza, decepción, rabia, desilusión…. Yo cuando estoy enfadada lo noto porque no puedo expresar en voz alta lo que siento, necesito un proceso de “digestión”, de pausa, de perspectiva,…para poder ordenar ese sentimiento con palabras.
El problema del enfado no es sentirlo, es quedarte mucho rato en él, recrearte demasiado en ese sentimiento que te impide sentir otros, muchos más positivos.
Te enfadas porque “sientes”, pero porque has de seguir sintiendo, “desenfádate” rápido.